“Bellas de noche”, el
documental de Jimena Cuevas sobre las super-vedettes setenteras en México, ha
llegado a los cines del país
¿Les recuerda algo el título? Exactamente, aquella famosa
película de ficheras (Miguel M Delgado, 1975) protagonizada por la bellísima Sasha Montenegro y el cuerazo Jorge Rivero. Sólo que aquí el cartel es distinto pero
igualmente sexoso: Lin May, Wanda Seux,
Olga Breeskin, Rossy Mendoza y la Princesa
Yamal.
¿Qué fue de esas fulgurantes
vedettes?
Como el cuento de la
cigarra
Estas estrellas del cabaret que todo lo tuvieron y tocaron
la fama y la fortuna son ahora unas sexagenarias desubicadas, dislocadas, que
viven una fantasía patética de juventud y belleza eternas y que sobreviven como
gato patas arriba con más o menos suerte:
Olga se volvió fanática religiosa y vive de forma modesta
pero cómoda en Las Vegas predicando la palabra del Señor. Wanda vive rodeada de caniches clamando
justicia divina para cuando Dios quiera llevársela pero bien rellena de bótox.
Rossy tiene delirios de escritora de metafísica sexy y Lin es la enfermera de
rostro desfigurado de un marido anciano que vive sus últimas horas. Princesa Yamal, la más “normalita”, es esteticienne y mantiene el equilibrio sin
soltar el cigarro gracias a una hija bonita y amorosa.
El destape mexicano
Tremendísima Rossy Mendoza |
En los años setenta, siendo yo un niño, veía con azoro los
carteles (cartelones los llamábamos en Tepic) que anunciaban los próximos
estrenos en los cines de la ciudad.
Generalmente eran fotos fijas en color o blanco y negro pegados sobre
una cartulina fosfori-loca o de otro color igualmente llamativo, sujetas con
chinchetas en las esquinas sobre una vitrina forrada de fieltro verde o rojo,
celosamente protegida con candados de archivero.
Los cartelones en offset a todo color eran cosa de las
películas gringas o alguna otra colada con gordo presupuesto. El paisanaje
masculino y verriondo se daba sus calentones con estas imágenes promocionales
de películas cachondas -versión vernácula de las sexi-comedias italianas de Lando Buzzanca y anexas - que derivaron en un sub-género llamado “cine
de ficheras”. ¿Por qué? Simplemente porque versaban sobre el mundo de los
antros y cabarets donde las damas de compañía acumulaban fichas canjeables por
dinero por cada cliente que entretenían. Ya si se iban al hotel era muy su
gusto y muy su arreglo con el cliente.
“Éramos como diosas”
"Princesa Yamal" en plenitud |
Lin May no es china, sino acapulqueña |
En los cabarés la copa, la compañía, el baile, las ficheras
más o menos agraciadas eran lo cotidiano, pero el verdadero imán eran las
exuberantes (requisito sine qua non) vedettes que, muy a su entender y
presupuesto, hacían su show, con la mente puesta en Las Vegas. “Éramos como
diosas” cuenta Rossy Mendoza la mejor
conservada de todas – “los hombres eran muy espléndidos con una: las flores,
las joyas, el abrigo de pieles, el carro… ¡corría el champán!”, agrega gozosa.
SuperOlga, "la mujerviolín" |
Wanda Seux, de Argentina con amor |
Antes que la Trevi, Wanda Seux – la más delgada de
todas cantaba y zarandeab a los hombres
del público. Su paisana argentina Princesa Yamal ejecutaba, a su modo, danzas árabes: “yo no
era exuberante pero tenía un cuerpo muy estético”, narra con su voz cavernosa
por el tabaquismo.
Por su parte Lin May afirma sin tapujos que lo suyo, lo suyo
era el strip-tease, mostrando sin
tapujos las caderas más generosas, pechos adolescentes y breve cintura con su
aspecto exóticamente chinesco, aunque es de Acapulco.
Hay categorías y sin lugar a dudas la reina de la noche de
lujo era Olga Breeskin y su violín, con esa “carrocería” como ella misma dice,
imponente y ese derroche en vestuario y “gallinero” a la que las otras no
podían aspirar: “hasta que todo se me vino encima como el (hotel) Continental donde cuando se derrumbó en
el terremoto del 85”, cuenta conmovida.
Colofón
En Bellas de noche hay
mucho recuerdo de gloria vodevilesca
pero sin tocar el drama humano, es “light”, superficial. Nos queda a deber la narrativa íntima, con
las luces y sombras de un buen documental biográfico. ¿O es que hubo censura
por parte de las intérpretes o de Televisa que vemos que intervino en la
producción?
Por no saber, no sabemos ni de dónde son ni su nombre ciudadano, amores, hijos, desventuras, (otras) glorias y miserias. Jimenita me queda a deber y mucho. Para el próximo (que me late que será sobre su padre) que se fije en los estupendos documentales de Biography Channel.
Vamos, digo yo... ¿ustedes qué opinan?
https://es.wikipedia.org/wiki/Bellas_de_noche_(pel%C3%ADcula)